Danelo Cavalcante logró evadir la cacería humana tras su pista, comiendo sandía, escondiendo sus heces fecales y moviéndose estratégicamente en las noches, según dijo el jefe de los alguaciles federales Rob Clark a NBC News.
El asesino convicto, quien se fugó de la prisión de Chester County, Pensilvania, el pasado 31 de agosto, mantuvo no solo a una comunidad en vilo, sino a brigadas de uniformados tras su paradero en turnos de 20 horas consecutivas.
Si bien las autoridades utilizaron equipo táctico, de luz infrarroja, canes K-9 entre otros, el prófugo había sobrevivido en la selva tras un crimen que presuntamente cometió en 2017 en su natal Brasil. “No creo que haya tenido un plan exacto. Él estaba sobreviviendo y evitando que lo capturáramos como pudiera. Estaba desesperado”, recalcó el teniente coronel George Bivens en la conferencia de prensa de la captura.
Según Clark, entre las sandías y el agua de los riachuelos que se encontraba, el reo brasileño se mantuvo hidratado durante todo el proceso. “Solo los primeros tres días dijo que se movió muy poco y a cortas distancias”, apuntó el alguacil federal. “Y cuando alcanzábamos a estar cerca, como quien dice, se alojaba en la maleza sin moverse, porque era impenetrable”.
La mochila y el bulto que se le vio cargar en algunas de las imágenes de vigilancia tenía una rasuradora, por lo que pudo removerse el bello facial y hasta cierto punto cambiar su apariencia. “Él se movía a lo largo de la línea de los árboles y fue hasta el punto de esconder o deshacerse de sus heces fecales para que las autoridades no supieran donde pernoctó”, reveló Clark.
Explicó que tras haber conseguido un rifle calibre 22 con mira y encendedor de luz, su meta era cometer un robo de auto a mano armada, mejor conocido como “carjacking”. “Nos llegó a decir que la presencia policial lo tenía abrumado especialmente en el segundo perímetro, por lo que su idea era cometer un ‘carjacking’ para huir hacia Canadá o a Puerto Rico”, sostuvo Clark.
Cabe señalar, que la Isla del Encanto fue uno de sus puntos de conectividad cuando huyó de Brasil en camino hacia Pensilvania.
“Él tenía en mente ese plan para las próximas 24 horas y creo que fue el mejor momento para nosotros apresarlo. Sostuvo dos heridas leves por la mordida del K-9, una inicial en la cabeza o la frente, por eso es que hay fotos de él sangrando, y otra en la pierna. Fue atendido por médicos”, agregó el alguacil federal.
Danelo Cavalcante, de 34 años, fue apresado casi sin que se diera cuenta. Estaba acorralado por personal de la Policía Estatal de Pensilvania y la Patrulla Fronteriza. Fue un perro K-9, llamado Yoda quien lo detuvo cuando estaba deslizándose por el suelo en un afán por huir.
El asesino convicto fue procesado e ingresado el 13 de septiembre a la prisión de máxima seguridad SCI Phoenix en Montgomery County. Ahí deberá servir la condena de vida en prisión por la muerte de su exnovia a cuchilladas frente a los hijitos de ésta en 2021.