Mientras Donald Trump espera su sentencia por 34 cargos de delitos graves en Nueva York el próximo 11 de julio, tiene por delante otros tres juicios penales en los que enfrenta cargos más graves.
El exmandatario también enfrenta cargos penales en Georgia, Florida y Washington DC. Que alguno de los casos penales restantes llegara a juicio antes de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre es una posibilidad, pero parece poco probable en este momento.
El expresidente también tiene pendientes varias apelaciones importantes, incluidas dos que podrían costarle más de $500 millones si pierde y otro caso pendiente ante la Corte Suprema de Estados Unidos que podría potencialmente obstaculizar al menos uno de los casos penales en su contra si gana.
A continuación te presentamos un vistazo a algunos de los casos judiciales restantes de Trump y su estado.
En Florida: los documentos clasificados de Mar-a-Lago
Si bien la pena máxima que Trump podría enfrentar en el caso de Nueva York es de cuatro años por cargo (una sentencia que es poco probable que reciba), algunos de los cargos en el caso de los documentos federales clasificados en Florida conllevan una pena máxima de 20 años de prisión.
El año pasado recibió una acusación federal de 37 cargos, alegando que retuvo ilegalmente y manejó mal montones de información de seguridad nacional altamente sensible en su resort de Mar-a-Lago. Se le imputaron cargos adicionales alegando que había tratado de encubrir sus malas acciones. Trump sostiene que no hizo nada indebido y se declaró no culpable.
En un momento, estaba previsto que el caso fuera a juicio el 20 de mayo, pero la jueza Aileen Cannon, nominada por Trump, pospuso la fecha indefinidamente a principios de este mes, citando "infinidad" de cuestiones legales que todavía tiene que resolver.
En Washington DC: interferencia electoral federal
El fiscal especial Jack Smith acusó a Trump de presunta conspiración para defraudar a Estados Unidos al alterar ilegalmente los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 y la transferencia pacífica del poder. Esta fue la primera vez que un expresidente estadounidense fue acusado de un delito.
El caso de Washington DC, originalmente programado para ir a juicio antes el caso de dinero secreto en Nueva York también se ha suspendido indefinidamente.
Esto se debe a que la Corte Suprema aceptó la apelación de Trump argumentando que sus acciones en torno al motín del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos estaban protegidas por la inmunidad presidencial, por lo que el caso quedó suspendido. El tribunal superior escuchó los argumentos del caso en abril y aún no ha emitido una decisión.
Si el tribunal de tendencia conservadora, que incluye a tres jueces nombrados por Trump, falla completamente a favor del expresidente, el caso podría ser desestimado. Si el tribunal devuelve el caso a la jueza Tanya Chutkan, con sede en Washington, para que realice más procedimientos sobre si algunas de sus acciones están exentas de procesamiento, eso casi con seguridad retrasaría cualquier juicio hasta mucho después de las elecciones mientras esas cuestiones se litigan más.
Si el tribunal superior falla completamente en contra de Trump a finales de junio, todavía sería teóricamente posible que hubiera un juicio antes de las elecciones, pero sería difícil, según expertos legales consultados por NBC News.
Los cargos del caso tienen penas máximas que van de cinco a 20 años de prisión. Trump se ha declarado no culpable.
En Georgia: otro caso de interferencia electoral
Trump enfrenta 10 cargos criminales en Georgia, en donde la fiscal Fani Willis lo acusó como parte de una conspiración para anular ilegalmente los resultados de las elecciones de 2020 en ese estado. El cargo de extorsión conlleva una pena de 5 a 20 años de prisión y Trump se ha declarado inocente.
El caso, que se inició en agosto de 2023, es el único de los casos penales pendientes en el que nunca se ha fijado una fecha para el juicio. Los fiscales habían pedido que el juicio empezara en agosto de 2024, lo que, según el abogado de Trump, Steve Sadow, “sería la interferencia electoral más efectiva en la historia de los Estados Unidos” porque Trump probablemente todavía estaría en juicio el día de las elecciones.
McAfee aún no ha fijado una fecha para el juicio, y podría no hacerlo hasta que un tribunal de apelaciones estatal decida una apelación sobre si Willis y su oficina deben ser descalificados del caso.
Millones de dólares en juego: otras pelaciones pendientes
Trump tiene tres apelaciones pendientes sobre sentencias que actualmente suman más de $560 millones, una enorme suma de dinero que tiene el potencial de causar estragos financieros para él y su empresa, si pierde.
La mayor de esas sentencias es la indemnización de más de $350 millones dictada contra Trump y la Organización Trump en el caso de fraude de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, a principios de este año. Esta suma aumentó después de que el juez Arthur Engoron la subiera a $464 millones debido a los intereses previos al fallo, y desde entonces ha aumentado en más de $100,000 dólares en intereses. Esa cantidad seguirá creciendo hasta que se resuelva la apelación.
Trump también está apelando dos veredictos en casos presentados por la escritora E. Jean Carroll. El primero fue un veredicto de $5 millones del año pasado, después de que un jurado declarara a Trump responsable de abusar sexualmente y difamar a la escritora, y el otro fue un veredicto de difamación de $83 millones a principios de este año. Tuvo que pagar una fianza de $91 millones para garantizar la sentencia durante la apelación.
También enfrenta demandas de alrededor de una docena de agentes de policía que resultaron heridos durante el asalto al Capitolio el 6 de enero del 2021. Un juez federal en Washington DC rechazó su intento de retrasar aún más esos casos el mes pasado.