NUEVA YORK - El exabogado personal del presidente Donald Trump demandó el lunes al secretario de Justicia, William Barr, y al director de la Oficina de Prisiones, afirmando que está siendo retenido de forma injusta para impedir que termine un libro que critica a Trump.
La demanda en nombre de Michael Cohen se presentó el lunes por la noche ante una corte federal en Manhattan, alegando que se violaron sus derechos contenidos en la Primera Enmienda cuando fue devuelto a un penal federal en Otisville, Nueva York, el 9 de julio.
El Departamento de Justicia no respondió en un primer momento a un mensaje pidiendo comentarios.
Cohen, de 53 años, había pasado a arresto domiciliario en mayo dentro de los esfuerzos por contener los contagios del nuevo coronavirus en prisiones federales.
Sólo había cumplido uno de sus tres años de condena, tras declararse culpable de cargos asociados a financiamiento de campaña y de mentir al Congreso, entre otros delitos.
Los cargos sobre financiamiento de campaña están relacionados con los esfuerzos de Cohen por organizar pagos durante la campaña presidencial de 2016 para que la actriz porno Stormy Daniels y la modelo Karen McDougal no hicieran públicas sus afirmaciones de que tuvieron relaciones extramatrimoniales con Trump. El presidente ha negado haber tenido esas relaciones.
La demanda de Cohen señaló que el abogado había dejado claros hace poco sus planes de publicar un libro con revelaciones justo antes de las elecciones de noviembre.
“Antes de las elecciones presidenciales de 2020, pretende hablar al pueblo estadounidense sobre la personalidad y las tendencias del señor Trump, sus asuntos privados y profesionales y su ética personal y de negocios”, según la demanda presentada en nombre de Cohen por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y los abogados Danya Perry y Samidh Guha.
En su demanda, indicaron que los delitos de Cohen derivan de “mentir al Congreso en nombre del señor Trump y cometer infracciones de financiamiento de campaña en nombre del señor Trump”.
Los abogados afirmaron que las autoridades federales volvieron a encarcelar a Cohen después de que el 26 de junio tuiteara “hablaré pronto” y el 2 de julio añadiera que estaba terminando su libro sobre Trump.
Según la demanda, agentes estadounidenses de libertad condicional que actuaban en representación de la Oficina de Prisiones y su director, Michael Carvajal, exigieron a Cohen que acordara no hablar a o a través de ningún medio, lo que incluía publicar un libro.
Los funcionarios hicieron esa demanda inconstitucional y cuando los abogados de Cohen pidieron aclaraciones sobre esa prohibición a hablar, se les dijo que su consulta se escalaría y el reo volvió a ser encarcelado, indicó la demanda.
Cohen está retenido en solitario desde que fue enviado a Otisville, añadieron sus abogados.
Su salud se ha visto perjudicada, ya que su tensión ha subido a niveles críticos, “provocando graves dolores de cabeza, dificultades respiratorias y ansiedad”.
Tampoco ha avanzado en su libro, señalaron. La demanda pedía una orden judicial para que Cohen volviera a arresto domiciliario.