MIAMI - La madre del guardia de seguridad asesinado la madrugada del sábado durante un tiroteo en un bar en Doral dice que la familia está devastada.
"Estamos destruidos, totalmente destruidos", dijo Jeanina Castellanos en declaraciones a Telemundo 51 y NBC6.
George Castellanos murió baleado mientras realizaba su trabajo como guardia de seguridad en el Martini Bar. Sus padres dijeron que era un buen hijo, que iba a FIU y que se iba a graduar el mes próximo. Además, era padre de una niña de dos años.
“Era excelente, recogía a su hija en la tarde, la bañaba y la dejaba lista para poder ir a trabajar", dijo Castellanos.
La policía de Miami-Dade dijo que un grupo de personas comenzó a discutir al interior del Martini Bar en CityPlace Doral. Castellanos intervino y fue asesinado por un hombre que sacó una pistola.
Las autoridades dijeron que dos oficiales de policía de Doral que estaban ahí, enfrentaron al hombre y se produjo un tiroteo. El sospechoso fue abatido y siete personas, incluyendo a uno de los agentes, resultaron heridas.
Peter Jordan dijo que todo sucedió muy rápido. Afirmó que estaba al interior del Martini Bar cuando escuchó los disparos.
“Pensé que si había un pistolero activo yo podría ser el siguiente", dijo Jordan. "Estábamos ahí para divertirnos y de repente estábamos escapando a las balas que, literalmente, pasaban a pulgadas de nosotros".
La alcaldesa de Doral, Christi Fraga, dijo que ha convocado a una reunión especial la próxima semana para discutir una ordenanza en la ciudad que regula los horarios de los centros nocturnos.
“Miraremos a la evidencia que nos ponga en la dirección de la decisión correcta para que nuestra comunidad permanezca segura", dijo Fraga.
Mientras tanto, la madre de Castellanos está apesadumbrada.
“Era un hombre excelente, no fumaba, no hacía nada, era un buen padre y un buen hijo", afirmó.