VALLE CENTRAL, California.- La erosión del suelo, pero también la sobreexplotación acuífera ha dañado a tal punto la corteza terrestre que no es capaz de absorber las lluvias torrenciales que se dejaron sentir en California durante la primera quincena de enero.
El manejo y gestión del recurso agua es un desafío para el estado. Pasar de una sequía extrema a inundaciones históricas en menos de un mes puede explicarse por los efectos que trae el cambio climático, sugiere el profesor de Ingeniería Ambiental de la UC Merced, Josué Medellín-Azuara
"Se vive una época de extremos climáticos", dice el experto. Pues el estado dorado está transitando de una sequía severa a un tiempo muy húmedo.
"Si tenemos un período muy seco, el suelo tiende a tener una alta porosidad. Hay mucho espacio para almacenar agua, pero si hay lluvia tras lluvia, esos espacios se empiezan a llenar, entonces el agua empieza a escurrir en la superficie", explica Medellín-Azuara.
En términos simples, podría aplicarse a un tazón con cereal al que se le vierte leche. "A medida que le líquido busca espacio entre el cereal está bien, pero llega un punto que el tazón se rebalsa", comenta el experto de UC Merced con esta analogía.
ROL DE LOS ACUÍFEROS
Los niveles de las aguas subterráneas, cotenidas en los denominados acuíferos, han disminuido durante los 3 últimos años en California. De hecho agricultores del estado han debido enfrentar restricciones en sus usos de agua para poder gestionar de mejor manera el recurso.
La sobreexplotación de los suelos, además de un extenso período seco ha secado miles de pozos domésticos desde el 2015, y dejado al menos 150 comunidades del Valle Central en riesgo, pues no tienen acceso a agua potable.
El agua subterránea representa hasta el 60 por ciento del suministro total de agua del estado durante condiciones secas. Las pulgadas de lluvia caída, está recargando de manera natural la napa subterránea, sin embargo, hay zonas donde el subsuelo está deteriorado y la cuenca hundida.
Estas aguas subterráneas que recorren el subsuelo forman gran parte del denominado Delta Sacramento - San Joaquín, definido como "el centro del suministro de agua de California", por el Departamento de Recursos Hídricos.
SEQUÍA EXTREMA
¿ DELTA SACRAMENTO - SAN JOAQUÍN?
Este Delta, que en otras palabras es un conjunto de diques y estuarios bajo tierra que recorren el estado, explica Medellín-Azuara, lo que hace es proporcionar agua a dos tercios de la población, además de alimentar millones de acres de tierras de cutivo, añade el Departamento de Agua estatal.
El Delta es la salida de los ríos Sacramento y San Joaquín, y algunos diques están dañados, propensos a inundaciones. Algunos de ellos ya colpasaron en las inudaciones de las últimas semanas. Ejemplos en localidades de Acampo, Wilton, Planada, entre otras comunidades rurales de los valles.
CALIFORNIA ¿LIBRE DE SEQUÍA?
Anuciado por la propia agencia esta semana, “el estado está capturando el exceso de agua como recarga artifical de los acuíferos, explica el profesor de UC Merced, Josué Medellín-Azuara.
"Esto pasa en el Yolo Bypass en el área de Sacramento, cuando el río supera cierto nivel, entonces se va por un biypass, una especie de dique", añade el ingeniero.
La gestión del recurso agua es fundamental, al mismo tiempo de prevenir otra repentina inundación. Por ello, la agencia estatal está usando el pronóstico del tiempo y otros factores para poder almacenar, redireccionar, o sacar agua de embalses y represas, dependiendo de su función.
"El agua capturada durante los períodos húmedos extremos, como el que ahora está experimentando California, se almacenará en cuencas de agua subterránea para su uso durante los períodos secos" señalo el Departamento de Recursos hídricos mediante un comunicado.
La Junta Estatal de Agua aprobó un permiso de seis meses para varios propietarios que puedan desviar el exceso de flujo del arroyo Mariposa, cerca de la ciudad de Merced. Esto también con el objetivo de recargar la napa de agua subterránea.
